23 de diciembre de 2009.

A todos les deseo MUCHAS FELICIDADES!!!!!! no importa la religion o creencia que tengan, importa la union y la alegria de compartir estos dias con quienes aman. Levantare mi copa pensando en todos Uds.
Gracias por permitirme compartir mis pensamientos con Uds.
FELICES FIESTAS!!!!!
Euge.

En construcción.

Pasado en demolición, futuro en obra... asi podria describir mi vida en estos días. Ya lo había dicho, decidí renovarme, dejar atrás las inseguridades, los miedos, buscar mi lugar, mi objetivo, mi paz.
Anoche comence un taller de psicodrama que brindan 2 psicólogos, compartí, por dos horas, con unas 15 personas, juegos e improvisaciones que nos ayudaron a descubrir lo que nos rodeaba y a encontrarnos a nosotros mismos en ese lugar; formando parte de un grupo; pertenenciendo; abriendo nuestras mentes a lo nuevo; disfrutando del silencio; de una abrazo; de una mirada; conociendo mediante una palabra o un gesto el alma de los demás. Con música relajante de fondo y las ganas de encontrarme yo misma, relaje mi cuerpo y despoje de prejuicios y temores mi mente, y me permiti ser yo misma, sin excusas, por dos horas.

Por mi.

"Deja que la vida te despeine" decia un mail que me pasaron hace mucho y que hablaba sobre darle mas espacio a las pequeñas cosas que nos hacen bien a diario, y dejar de exigirnos tanto en lo que puede esperar. Desde ayer que estoy despeinada y no me refiero a mi pelo, sino a que he decidido vivir mas a mi modo y dejar de hacer todo para aceptacion de los demas; ojo no es que me libere de un dia para otro, pero pienso darle a las cosas su justa importancia, ni mas ni menos, relajarme y hacerme cargo de los problemas cuando estos existan y no antes. Ayer la cama estaba destendida y los platos del mediodia sin lavar, sin embargo, cuando llegue a la tarde del trabajo, y antes de ordenar y limpiar todo, para hacer la cena, me tome una hora para mi; prepare mate, corte una pan dulce que compre camino a casa, y me sente a ver tele y a jugar con mi gordita; ella lleno el living de juguetes y alli nos tiramos en el piso las dos, por un buen rato; lo necesitaba, lo merecia. Despues de todo, no pido mucho por querer disfrutar de una hora jugando con mi hija sin sentir que estoy dejando de lado algo mas importante; un plato sucio puede esperar, la sonrisa de mi bebota no.